En velero se llega a los tramos de costa más secretos y recónditos, calas escondidas entre fiordos por descubrir, encantadores acantilados y peñascos que admirar de costa a costa, escasos archipiélagos con vida submarina a su alrededor que explorar practicando snorkel, dunas de arena y playas caribeñas a las que llegar nadando y en canoa. Los días en velero discurren por parajes del Edén, escenas memorables para puestas de sol inolvidables. Es una forma verde y sensorial, estimulante y fantástica de vivir el mar de Cerdeña, elegido por los navegantes como un paraíso de bellezas, donde está prohibido el aburrimiento.
¿Te gustaría celebrar una ocasión especial entre amigos pero dispones de poco tiempo y no tienes experiencia de navegación en velero? El minicrucero con capitán a bordo es justo lo que necesitas. Te llevará con seguridad hasta donde la belleza no tiene fin, sin pensar en otra cosa que en vivir cada momento de una breve escapada memorable en un velero. Y si te encuentras sin motivo aparente escuchando el viento, observando el vientre de las velas y escrutando el mar, es la antigua fascinación de la navegación en velero la que te llama. Una pena no complacerlo.
Tienes una licencia de navegación y puedes contar con una "tripulación" de amigos para hacer malabarismos con la vela mayor y el foque. Reserva el barco, lo encontrarás listo en el muelle del puerto deportivo donde comienzan tus vacaciones en plena libertad y ya está escrito: serán memorables. Días de navegación entre playas y calas fondeadas bajo la costa, donde se tira el ancla para bucear y nadar, hacer snorkel en el fondo marino, bucear y andar en canoa. Un fin de semana o una semana, seguirá siendo difícil volver a la tierra.