Un espectáculo todavía más fascinante si lo observas desde la majestuosa torre que la domina desde lo alto. La gran playa de Bosa Marina se encuentra al sur del puerto turístico y del barrio portuario de la ciudad medieval de Bosa, el pueblo más importante de la Planargia. La playa de arena dorada es ancha y mide un kilómetro de longitud, el mar presenta unos colores que varían del verde esmeralda al azul y el fondo es arenoso con una suave pendiente. Gracias a sus aguas transparentes y limpias, todos los años recibe la mejor puntuación otorgada por la asociación Legambiente. Es la playa ideal para disfrutar de un día de descanso absoluto, siendo perfecta para las familias con niños, gracias también a los servicios que ofrece, como restaurantes y casetas donde alquilar embarcaciones y todo tipo de equipos. En ella podrás realizar excusiones en barca e inmersiones submarinas y practicar juegos de playa y deportes acuáticos, como kitesurf y windsurf. La playa termina con un espigón que une la tierra firme con la isla Rossa, dominada por una torre aragonesa donde en verano se celebran exposiciones temporales.
La costa de Bosa tiene, en total, veinte kilómetros de longitud: al sur se encuentra la playa de Turas, caracterizada por su arena de color gris claro que penetra en el mar verde y cristalino cuyo fondo se hunde rápidamente. Las otras perlas se encuentran al norte, a lo largo de la carretera panorámica hacia Alguer, empezando por s’Abba Druche, a cuatro kilómetros de la ciudad. Un kilómetro más al norte está la espléndida playa de arena blanca de Compoltitu, ubicada en una bahía muy cerrada y rodeada de rocas pulidas por el agua y el viento. Al cabo de otros dos kilómetros está la cala sa Codulera con sus cantos rodados y aguas límpidas y su torre aragonesa en lo alto de una colina. Al lado está Torre Argentina, una serie de ensenadas, caletas y blancos acantilados donde podrás disfrutar de playas de arena con escollos planos, que sobresalen de un mar de azul cobalto. Todavía más al norte, casi en el cabo de Marargiu, hábitat de los alimoches, una rara especie de ave rapaz, se encuentra la protegida cala Managu, donde te espera una playa de fina arena de color ámbar y unas aguas siempre tranquilas de un bellísimo color azul-verde. Delante, un islote que hace que sea todavía más atractiva.