Su territorio de colinas está entre lagos artificiales del Medio Flumendosa y Mulargia. La creación de dos embalses artificiales y la presencia de numerosas fuentes han creado un microclima muy favorable para el desarrollo agrícola de la zona, dedicada a la producción de cereales, uvas para vino y olivos. En las superficies cultivadas se alternan áreas de vegetación mediterránea, bosques de robles, melojos y alcornocales. La economía del pueblo se basa también en la producción quesera de gran calidad, y Nurri dispone de una de las plantas de transformación láctea más modernas de la isla. El topónimo probablemente deriva del hecho que el núcleo originario de Nurri surgió alrededor del Monumento Nurágico Sardajara, del que aún se pueden observar restos. Todo ello y la presencia de numerosas domus de janas y otros monumentos nurágicos remite su origen a la prehistoria.

Son muchos los restos del periodo romano, sobre todo en la ciudad de Biora, edificada con fines militares para buscar canalizar las incursiones de las poblaciones barbáricas en la llanura. En el Medioevo, Nurri formó parte del Giudicato de Cagliari, volviendo a la curadoría de Siurgus. En el siglo XIV fue concedido, junto con Mandas y Escolca, en feudo a Francesco Carròs, para ser después del Ducado de Mandas.