El centro agrícola de Riola Sardo se encuentra a orillas del río Foghe. Los numerosos nuraghes de la zona -como los de Oresimbula, Priogu, Biancu y Zuaddas - indican que aquí han existido asentamientos humanos desde tiempos remotos. El centro del pueblo se caracteriza por las típicas casas del Campidano.
La economía del pueblo se basa en su variada producción de frutas, hortalizas y vinos de gran calidad, en particular el Vernaccia, que ocupa un lugar de honor.
El 26 de julio, la procesión en honor de los santos Joaquín y Ana se acompaña de bailes, fuegos artificiales, música y canciones tradicionales.
La iglesia parroquial de San Martino, patrón del pueblo, merece una visita: data del siglo XVI, pero sus cimientos son más antiguos y fue construida en estilo románico. La fachada es de piedra arenisca y presenta un arco final y una cúpula bulbosa que recuerda a la catedral de Oristano. En el interior de la iglesia hay un crucifijo del siglo XVI, dos pilas de agua bendita del siglo XVII y un coro de madera que data de 1884.
Por otro lado, la Casa Carta, del siglo XVII, es un buen ejemplo de una típica mansión campidana.
Hace unos años, una cantera abandonada cercana al pueblo se convirtió en el «Parco dei Suoni» (Parque de los Sonidos), un escenario especialmente evocador para conciertos y festivales de jazz y rock.
Según el calendario de eventos de Riola Sardo, el 26 de julio tiene lugar una solemne procesión en honor de los santos Sant'Anna y San Gioacchino. Al día siguiente, se organizan diversos espectáculos de danza, fuegos artificiales, música y canciones en las calles del pueblo para acompañar la fiesta de San Martino. Otra cita de interés para los aficionados a la cata de vinos es el Motoraduno internazionale della Vernaccia. De viernes a domingo, los participantes se reúnen en el parque, desde donde parten en paseos por el pueblo y excursiones por los alrededores. El 11 de noviembre se celebra la fiesta en honor de San Martín (San Martino).