Villacidro es un antiguo pueblo enclavado en el bosque a los pies del Monte Linas. Hay varios arroyos y cascadas, entre ellos Sa Spendula, lugar por el que le gustaba mucho pasear al poeta D'Annunzio y al que dedicó un soneto. El pueblo produce cítricos, melocotones y cerezas en abundancia. En la actualidad, Villacidro es un importante centro de producción de uva de vinificación, para vinos como el Nuragus, el Barbera y el Cannonau. Estos vinos se destilan para producir la famosa acquavite de Villacidro.
Santa Bárbara, patrona del pueblo, se celebra el 4 de diciembre. La iglesia de San Sisinnio, del siglo XVII, está enclavada en un bello paisaje de olivos centenarios.
El pueblo cobra vida el 1 de enero, cuando se celebra Su Trigu Cottu (trigo cocido), y el 17 de enero, cuando se enciende un fogón en honor de San Antonio. En junio se celebra la Fiesta de la Cereza.
Se recomienda visitar el Museo Arqueológico de Villa Leni, en el Monte Granatico, donde antiguamente se almacenaba el trigo (Banco del Grano).